jueves, 24 de diciembre de 2015

Carta a mis padres

Queridos papis:
Os escribo antes de que nos reunamos en torno a la mesa para la cena de Nochebuena.
Vamos todos a casa de Almu y Víctor, todos, todos, o sea que la alegría, los villancicos y las bromas están aseguradas.
El año pasado tuve que poner en la balanza lo bueno y lo malo que me había ocurrido, para decidir si había sido o no, un buen año.
Esta vez no tengo que poner balanza. El 2015 quedará como uno de los más felices de mi vida porque han nacido Victoria y Manuela.
Victoria vino en enero, el mes de su papi, su abuelo y su tío Carlos. La habríais querido desde el primer momento. Nos tiene a todos enamorados, por su simpatía y su sonrisa.
Cuando la pequeñaja tenía sólo dos meses, nos anunciaron que en noviembre iba a venir otro bebé a la familia, una primita.
Aunque la esperábamos para el día 30 de noviembre, decidió que no quería esperar tanto y se adelantó. También coincide con un mes de muchos cumpleaños, el de Fátima, el de su tía Almu y el mío.
Es muy chiquitita, una pizquita que  nos tiene a todos pendientes de que vaya ganando gramos y se convierta en un bebé rechonchete al que poder achuchar con todo nuestro amor.
No es que este año no hayan pasado más cosas, pero estas dos personitas han llenado tanto espacio que han tapado lo demás.
Vuestros nietos son felices y nosotros con ellos.
Arí tiene trabajo, rodeada de niños, está feliz.
Los míos han cambiado de trabajo, buscando mejorar, probar lugares diferentes, tener experiencias en otros campos.
Estaríais orgullosos de los tres.
Yo os echo mucho de menos, porque os imagino disfrutando de este momento tan dulce que yo estoy viviendo, pero así es la vida, no se puede tener todo.
Por lo demás, todos estamos bien. Procuramos hacer comidas familiares para reunirnos, porque, en este tiempo de locos, cada vez es más complicado coincidir.
En vuestra casa viven unos estudiantes muy majos, hemos sido incapaces de deshacernos de ella, aunque vuestros recuerdos los tenemos todos nosotros, repartidos. Mamá, nunca he tenido tantos jarrones y me quedé con las fuentes de la abuela, pero no creas que sólo de adorno, que las he usado alguna vez que he hecho una comida especial.
Este año, he puesto el Árbol de Navidad en alto, porque Victoria, aunque no camina sola, se recorre toda la casa apoyada en las paredes y no quiero que se lo eche encima. Al Nacimiento todavía no llega, o sea que ocupa su lugar de siempre.
Bueno, no me enrollo más.

Ya sabéis que estáis conmigo, que me acompañáis cada día pero, sobre todo, en Navidad.
Un beso muy grande de vuestra hija.

lunes, 21 de diciembre de 2015

Mis lecturas de 2015

Mis amigos escritores y blogueros, que leen muchísimo, hacen listas con los libros que más les han gustado en el año.
Yo voy a comentar los que he leído:

Palmeras en la nieve de Luz Gabás: Una gran historia que transcurre a lo largo de tres generaciones. Muy buena. Deseando ver su adaptación al cine.

La trampa de Mercedes Gallego: Me gustó, me cae muy bien Candela Luque pero Ramona Cano en “El asesino del ajedrez” dejó el listón muy alto.

La Isla Perdida de Manuel Navarro: Fue un libro que me impactó, no me lo esperaba. Me pareció un argumento muy original y con una forma de escribir muy sencilla. Me gustó mucho.

La chica de las fotos de Mayte Esteban: Me pareció una novela muy agradable, de las que lees con una sonrisa y te da pena que se acabe.

Los muertos no aceptan preguntas de Antonia Romero: Me ha gustado mucho. Secretos, amor, maltrato y algún que otro espíritu.

El medallón de la magia de Mayte Esteban: A pesar de estar catalogada como literatura juvenil, disfruté mucho leyéndola. Diría que es para cualquier edad.

El Manuscrito 2 de Blanca Miosi: Ya me había gustado El Manuscrito 1 y éste no me decepcionó.

Mujeres de agua de Antonia J Corrales: La mejor lectura del año.
http://ags59.blogspot.com.es/2015/11/mujeres-de-agua.html

Pepe Pepino de Maria José Moreno: Qué cuento más tierno, que además siempre tendrá el honor de ser el primero que le compré a mi nieta Victoria y que le dedicó su autora. Entrañable.

La primera tarde después de Navidad de Marta Rivera de la Cruz: Este es otro cuento que compré para mi nieta y que todavía está pendiente de la dedicatoria por su autora. Como todo lo que escribe Marta, precioso.

La sonata del silencio de Paloma Sánchez Garnica: Diría que es una lectura imprescindible. Es el único libro que he leído de esta autora, pero es impresionante. Me ha gustado muchísimo. Deseando ver la adaptación televisiva.

Treinta postales de distancia de Sara Ventas: Este es otro de los que se lee con una sonrisa y te gustaría que la historia siguiese.

Un amor para Rebeca de Mayte Uceda: Me pareció demasiado descriptivo, una guía de viajes no habría sido tan completa. Está muy bien escrito, pero a mí me resultó pesado.

Vuelve a decirme por qué no debería hacerlo de E.M.Lledri: con éste he acabado el año, porque aunque empiece otro, seguro que no lo termino antes de que comience el 2016. Me ha gustado mucho, le dediqué una reseña.
http://ags59.blogspot.com.es/2015/12/vuelve-decirme-por-que-no-deberia_21.html

No sería justo que no mencionase los relatos que me han regalado en sus blogs o en facebook, durante todo el año, Maria José Moreno y Pilar Muñoz. Todos preciosos.
Una mención especial al relato “Oasis de arena” de Mayte Esteban, precioso, que me fue gustando párrafo a párrafo y que, una vez terminado, me regaló dedicado. Todo un detalle.


Tengo que decir que desde que leo autores españoles, la mayoría no muy conocidos, que llegan a mí porque se van recomendando unos a otros, no suele decepcionarme ningún libro.

FELIZ NAVIDAD

sábado, 19 de diciembre de 2015

Vuelve a decirme por qué no debería hacerlo: Mi opinión

Haciendo caso a mi amiga Antonia Corrales, voy a hacer, a mi manera, la reseña de algún libro de los que leo, eso sí, solo si me ha gustado. No busquéis en mi blog críticas negativas porque no las vais a encontrar.
“Vuelve a decirme por qué no debería hacerlo” de E.M.Lledri.
Sinopsis:
El cadáver de un turista inglés es hallado flotando en las aguas del río Eisbach en Munich. Sin embargo, una muerte que se anuncia como accidental, no parece serlo cuando Lothar Heim, un sofisticado ejecutivo del mundo del automóvil, es encontrado en el lugar de los hechos.
Aunque en apariencia el caso parece sencillo, las piezas comienzan a no encajar cando aparecen en escena INTERPOL y Kristín Isikawa, una atractiva mujer que afirma conocer la verdad sobre lo ocurrido.
A través del interrogatorio, y los recuerdos de los protagonistas, la trama se va desvelando y deja al descubierto la verdadera relación de Kristín con Lothar, así como su auténtico papel en una compleja conspiración de mentiras y falsas apariencias, de muerte y amor.

Sobre su autor poco puedo decir. Es el pseudónimo elegido por las creadoras, que lo inventaron al azar mezclando las letras de sus nombres y apellidos.
Es su primera novela. Hasta ahora habían escrito tres relatos cortos “En el traje de Eva”, “Desde aquel día” y “Recuérdalo”.
En palabras de sus autoras, pensaron en un argumento y en un tipo de novela, romántica con intriga, que les gustase leer a ellas.
Con una complicada técnica, en la que el argumento fue dividido en capítulos y luego en escenas, que se repartían, cada una escribía la escena que le había tocado para luego intercambiarla tantas veces como fuese necesario para que, con los retoques de la otra, quedase a gusto de las dos.
Lo conseguido ha sido un libro buenísimo, que atrapa desde su primera página en una trama en la que nada es lo que parece, totalmente imprevisible.
Pongamos en una ensaladera unos protagonistas guapetones, con mucho que ocultar, viviendo una historia de amor con mayúsculas. Aderecémoslo con una investigación policial, interrogatorios, chantajes, obsesiones y depravación. Y antes de unir todos los ingredientes, añadamos unas gotas eróticas, encajadas con tanta elegancia que a nadie le puedan molestar.
Por ponerle alguna pega, el nombre de la ensalada es muy largo, deberían de haber elegido un título más fácil de memorizar.

El resultado: Magnífico. No podéis dejar de leerlo.

Crónica de una presentación: "Vuelve a decirme por qué no debería hacerlo"



 Cuando Emiliana, mi enfermera favorita, me dijo que había escrito un libro, no me lo podía creer. Cuando me contó que lo había hecho “a cuatro manos” con su amiga y compañera, Elena, me quedé perpleja.
La editorial Divalentis había creído en su novela, y la iba a publicar en papel.
Pero a mí me apetecía que su presentación no se quedase en una más y le ofrecí la ayuda de la que disponía: Presentarles a la escritora Mercedes Gallego para que colaborase con ellas y pedirle a Gema, presidenta del club de lectura “tardes en sepia” que propusiese trasladar a este acto la habitual reunión de los viernes.
Ayer acudí al Espacio Ronda ilusionada y nerviosa, quería que todo saliese muy bien.
La sala estaba llena de familiares, amigos, compañeros de trabajo, lectores…
El representante de la editorial, agradable y cercano, Mercedes hizo una exposición del libro tan buena, con su habitual humor, que dejó a los asistentes con ganas de más y las autoras desgranaron lo poco que se puede contar sin desvelar nada de la trama.
Rompimos en aplausos y comenzó una larga fila de espera para las firmas y las fotos.
Se hicieron agradables corrillos de conversación, acompañados de un vinito dulce y unas galletas.
Al final, dos horas después de haber llegado, nos tuvieron que echar.
En el recuerdo quedará una tarde inolvidable y espero que el principio de una larga carrera literaria.

Felicidades Emiliana y Elena.